Traducido por Brenda Moreno Espinosa
Una nueva investigación muestra el inmenso potencial de los parques eólicos oceánicos. Los vientos del Atlántico Norte son lo suficientemente fuertes como para teóricamente, proporcionar la energía suficiente para toda la civilización, según un estudio publicado en el diario científico Proceedings, de la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos. Esto, por supuesto, requeriría cubrir amplias extensiones oceánicas con turbinas eólicas.
Europa tiene una de las instalaciones eólicas marinas más grandes del mundo. Por otro lado, el primer parque eólico marino en los Estados Unidos, que se encuentra frente a la costa de Rhode Island, se conectó en línea el año pasado. No obstante, estos parques eólicos se encuentran cerca de la costa. El potencial de la energía eólica de los océanos abiertos permanece en gran parte inexplorado, escriben en su artículo, Anna Possner y Ken Caldeira del Instituto de Ciencias Carnegie.
Los parques eólicos flotantes en mares y océanos profundos no solo estarían fuera de la vista, sino que también serían más seguros para las aves y los murciélagos. Además, los vientos soplan mucho más rápido sobre los océanos abiertos que en los lugares más ventosos de la tierra, por lo que las turbinas en el océano abierto pueden generar al menos tres veces más energía que en tierra.
En los parques eólicos basados en tierra, cada turbina generalmente genera menos energía a medida que aumenta el tamaño del parque o las turbinas se colocan más cerca. Eso es porque cada turbina extrae algo de energía del viento, ralentizándola. Los grandes parques deben diseñarse cuidadosamente con turbinas colocadas de esa manera. Algunos estudios han argumentado que grandes parques eólicos generan alrededor de 1,5 vatios por metro cuadrado.
Sin embargo, en mar abierto, las velocidades del viento son 70 por ciento más rápidas que en tierra. Al mismo tiempo, los ciclones y los sistemas de baja presión reducen los vientos fuertes de la atmósfera superior a la altura del eje de la turbina para reponer, de esta forma, los vientos que las turbinas extraen. Así que las turbinas en océano abierto pueden capturar tres veces más energía eólica.
Los investigadores tomaron en cuenta estas condiciones atmosféricas y utilizaron un modelo de computadora para comparar la producción de grandes parques eólicos en Kansas, con los hipotéticos parques en el océano abierto.
El océano Atlántico Norte, en particular, es un tesoro eólico. Los investigadores calcularon que los parques eólicos allí podrían generar 6 vatios por metro cuadrado. Así mismo, calcularon que la producción dependería de la temporada. En los meses de otoño e invierno, los parques eólicos a gran escala distribuidos en más de 3 millones de kilómetros cuadrados, podrían producir 18 teravatios de potencia, suficientes para todo el mundo. En el verano, habría menos viento, pero lo suficiente para suministrar toda la electricidad de Europa.
“Si bien aún no existen parques eólicos en aguas profundas a escala comercial”, escriben los investigadores, “nuestros resultados sugieren que si tales tecnologías, se volvieran técnica y económicamente factibles, podrían proporcionar energía a gran escala para toda la civilización”.
Fuente: Anna Possner y Ken Caldeira, Potencial geofísico de la energía eólica en los océanos abiertos. PNAS. 2017.
Foto cortesía de Vattenfall.