Traducido por María Fernanda Enríquez
El incremento a largo plazo de las temperaturas globales y la subida del nivel del mar podrían ser superiores a lo que predicen los modelos climáticos, aun si cortamos drásticamente las emisiones de carbono. Y en el caso de que continuemos con las emisiones altas, estos modelos probablemente subestiman aun las consecuencias de corto plazo.
En un estudio recientemente publicado en Nature Geoscience, un grupo de investigadores internacionales investigaron los modelos climáticos computarizados con información de tres periodos cálidos en el pasado del planeta. “El aumento del nivel del mar y el calentamiento regional y global en el largo plazo podría ser significativamente más severo de lo que los modelos más avanzados proyectan,” según concluyen.
Los investigadores juntaron información de estudios previos del Máximo Térmico Holoceno (que ocurrió hace 9,000 – 5,000 años), el último interglaciar (hace 129,000-116,000 años), y el periodo caliente a mediados del Plioceno (hace 3.3-3 millones de años).
El Máximo Térmico del Holoceno y el último interglaciar ocurrió debido a los cambios en la órbita de la tierra y como resultado hubo más radiación solar en latitudes altas. El calentamiento de mediados del Plioceno se debió al incremento de las concentraciones de dióxido de carbono a cerca de 450 partes por millón, lo cual es similar a las predicciones de bajas emisiones para los escenarios de cambio climático.
Los datos usados en el nuevo análisis se encuentran en investigaciones paleo climáticas de todo tipo incluyendo núcleos de hielo, estudios de sedimento, registros de fósiles, isotopos atómicos y más. Los investigadores compararon estas observaciones con predicciones futuras generadas por modelos informáticos conocidos.
En base a evidencia de periodos cálidos anteriores, los incrementos en las temperaturas globales promedio de tan solo 1 a 2 °C sobre las condiciones preindustriales podrían resultar en cambios generalizados en el ambiente terrestre. Las capas de hielo del Antártico y Groenlandia podrían reducirse drásticamente, contribuyendo con un aumento de 6 metros en el nivel del mar. El nivel del mar podría también incrementarse mucho más rápido de lo que ha sucedido en el pasado – tal vez cerca de 7 mm por año.
Los reajustes totales del bioma del planeta podrían también surgir con estas temperaturas. Los rangos de pequeños organismos que forman la base de cadenas alimenticias en el océano podrían cambiar, resultando en un efecto dominó a través de todo el ecosistema marino. Los bosques boreales podrían imponerse en la tundra, mientras que algunos bosques templados y subtropicales serían reemplazados por pastizales propensos a incendios.
La norma en los estudios de cambio climático es usar modelos informáticos para predecir el calentamiento, aumento del nivel del mar hasta el año 2100 – cerca de 80 años a partir de hoy. Pero el clima terrestre puede llevar cientos de miles de años para equilibrarse.
Los nuevos análisis sugieren que cuando los modelos informáticos se extienden mucho al futuro, estos subestiman calentamiento probable por un factor de dos. De esta forma, también subestiman un aumento eventual del nivel del mar.
“Las observaciones de períodos cálidos anteriores sugieren que un número de mecanismos de amplificación, que son pobremente representados en modelos climáticos, incrementan el calentamiento a largo plazo más allá de las proyecciones de modelos climáticos,” según expreso en una rueda de prensa el autor líder del estudio, Hubertus Fischer de la Universidad de Bern.
Los modelos climáticos también subestiman el calentamiento extra que tiende a afectar a las regiones polares, así como también el calentamiento bajo escenarios de altas emisiones.
La buena noticia es que los modelos son bastante satisfactorios al predecir cambios pequeños, esto quiere decir cambios bajo escenarios de bajas emisiones y tendencias de corto plazo hasta cerca de 2100. Este es otro factor para luchar contra el cambio climático tan fuerte como sea posible ahora – y no parar aun cuando alcancemos los objetivos más ambiciosos de hoy día.
Fuente: Fischer H. et al. “Palaeoclimate constraints on the impact of 2°C anthropogenic warming and beyond.” Nature Geoscience. 2018.
Imagen: Cartoonstock